Es buenísimo y no me
extraña que se porte tan bien porque recibe muchos besos de su hermana Alma, que le quiere con locura.
Álvaro aún es muy pequeño para abrir regalitos así
que Alma me ayudó
a descubrir la sorpresita que le había llevado: un súper cuadro personalizado para decorar su habitación.
Como sé que llegará muy alto y será un chico muy listo me lo he imaginado siendo piloto. ¡Mirad cómo saluda!
0 comentarios: